sábado, diciembre 30, 2006

Que les corten la cabeza

En una de las raras ocasiones en que se muestra coherente, Alan García está de acuerdo con la ejecución de Hussein e "indignado" por el fallo de la CIDH que pide una indemnización del Estado a las víctimas de la matanza de los penales de 1992. Es coherente, y muestra que nuestro presidente, como otros muchos políticos actuales, no cree en el derecho a la vida como algo inviolable, y considera que el Estado puede decidir quién merece o no seguir viviendo. Para ellos, los criminales perderían su condición de ser sujetos de derecho, y probablemente su condición de personas, en función de lo que defina un poder superior.

Que
había terroristas entre las víctimas -mortales o no- de la masacre que dirigió Fujimori en el penal Castro Castro, los había. Y merecían cumplir la condena que se les había impuesto. Pero ningún crimen podía quitarles el derecho de no ser asesinados por el Estado. Saddam Hussein era un criminal, y como tal merecía un juicio justo. Aplicar así la pena de muerte convierte a la persona en objeto, en un símbolo de venganza, de martirio, de liberación, de victoria, de lo que sea, pero dejando de ser persona, ser humano. Y nadie tiene por qué decidir cuándo alguien deja de ser persona. Muy aparte de estas consideraciones, la muerte de Hussein tiene una oscura motivación que apunta hoy Javier Ortiz en su blog Apuntes del Natural:

¿En qué medida este juicio no ha sido llevado a sus últimas e irreversibles consecuencias para impedir que hubiera más juicios sobre lo sucedido en Irak durante la presidencia de Husein? (...) Todo el mundo recuerda (o no, porque la memoria colectiva es fragilísima) que el régimen de Husein lanzó una guerra brutal contra Irán, que contó con el beneplácito y el apoyo político, diplomático y militar de Washington y Moscú, guerra que resultó un fiasco, pero en la que el ejército iraquí se sirvió, lo mismo que en sus campañas contra el pueblo kurdo, de armas químicas proporcionadas por sus aliados occidentales.

Y, claro, si esos crímenes se juzgaran, podría ser que algunas grandes potencias, de ésas que ahora ocupan Irak, tuvieran que dar algunas explicaciones enojosas. Y a lo peor algunos de sus ex dirigentes se encontrarían en la desagradable tesitura de acompañar a Sadam Husein en el cadalso.



2 comentarios:

Erayo Peroyano dijo...

Y es de notar también que el juicio fue un circo orquestado para que hubiese una sentencia condenatoria a muerte de Sadam justo antes de las elecciones a las Cámaras legislativas en Estados Unidos, para apuntarse Bush un tanto que, en teoría beneficiaría a su Partido Republicano. Por suerte el tiro le salió por la culata.

Es de locos: un Estado democrático occidental en pleno siglo XXI abogando por la pena de muerte, promocionando juicios sin las debidas garantías, manteniendo un campo de prisioneros ilegal, practicando detenciones ilegales, saltándose a la torera la legalidad internacional, etc., etc. Y lo que nos queda por ver.

Un saludo.

Anónimo dijo...

Hemos colgado nosotros el video completo de la muerte de Saddam Hussein si ustedes estan interesados. En este pueden ver como muere ahorcado Sadam Hussein.
Lo pueden encontrar en www.mis24h.com.
Muchas gracias y próspero año nuevo!
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Costin,
administrador mis24h.com