Hace unos días, el Director de Inteligencia de EEUU, John Negroponte, confirmó que la intercepción telefónica y otras formas de espionaje en nuestro continente por parte de su país son cada vez mayores.
“Estamos fortaleciéndonos en lugares en los que no hemos estado (recientemente), donde habíamos dejado que las cosas se atrofiaran desde el fin de la Guerra Fría –en América Latina y África–”, dijo Negroponte, coordinador de las labores de inteligencia de las diferentes agencias de E.U., como la CIA y el Pentágono.
Esta expansión habría sido ordenada por el presidente George W. Bush y en particular se enfoca en “Inteligencia Humana” (humint), que consiste en el reclutamiento de espías entre ciudadanos de otros países y el envío de nuevo personal estadounidense. (...)
The New London Day reportó el envío de un submarino nuclear, el USS Virginia, en una misión de espionaje en “apoyo de la guerra contra el terrorismo” por la región. (...) “Esta historia es increíble. Construimos un submarino a un costo de 2.400 millones de dólares con capacidades que hacen recordar la Guerra Fría y la primera misión que se le asigna es ir a Suramérica a interceptar conversaciones vía celular”, criticaba poco después William Arkins en The Washington Post.
Lo triste es que para el gobierno estadounidense los problemas no tienen que ver con amenazas reales a la seguridad de sus ciudadanos. Seguramente durante la guerra fría tampoco era esa la prioridad. Al fin y al cabo, gobiernos que ellos auspiciaron (como el de Pinochet por ejemplo, o varios centroamericanos) muchas veces desaparecieron o asesinaron a norteamericanos de a pie entre sus cientos de crímenes.
No. Lo que en realidad les preocupa es que existan países que se salgan de su órbita. Sea por gobiernos elegidos o no, por regímenes izquierdistas o no, por dirigentes que violan derechos o no. Eso da igual. El único criterio es si quieren trabajar bajo las reglas de EEUU. Las agresiones contra nuestros países, sea con violencia abierta o con intrusiones diversas, se intensifican siempre que un pueblo hace cualquier tipo de intento por tomar decisiones sobre su propio destino.
domingo, abril 30, 2006
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1 comentario:
y esto como se relaciona con nuestro contexto? Supongo que si sale elegido Ollanta, tendremos a los gringos encima mañana tarde y noche. Si sale Alan... ¿cómo saberlo? todo depende del humor con que amanezca, pero supongo que los gringos ya habrán notado que, en lo que respecta a sus intereses, este perro ladra pero no muerde.
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